Voces de barrio.


Proyecto Voces de barrio.




"¿No puede uno hablar aquí o qué? Coño, a ver si no puede uno hablar aquí. A la mierda, joder. Estoy hablando con el ministro y no con ustedes. Ustedes están habituados a hablar siempre porque aquí han controlado el poder toda la vida y ahora les fastidia que vengamos aquí a poder hablar las gentes que hemos estado torturados por la dictadura. Eso es lo que les jode a ustedes, coño, y es verdad, joder. ¡A la mierda!".
                                                              José Antonio Labordeta  
La idea de Voces de barrio es muy simple dar voz a todo el mundo. Que sea simple no significa que sea sencillo.
Tres puntos para pensar dónde estamos:
- Cultura como producto de consumo: La cultura fluye con la sociedad y ayuda a transformarla. Creemos en la participación y en una cultura creada por todas las personas y no solo por unas elites o unxs pocos, aún así vemos como día a día la cultura en vez de ser una construcción de la sociedad se va convirtiendo en un producto de consumo donde la empresa de turno o la institución nos “ofrece” una actividad cultural a consumir.
- Concentración de recursos “culturales”: Por otro lado observamos barrios y zonas de València donde la actividad cultural por parte del mercado o instituciones es prácticamente nula mientras que otras están saturadas. El proceso de concentración de actividades culturales esta muy relacionado con la aparición de amplias desigualdades en las ciudades siendo según muchos estudios un factor esencial en los procesos de gentrificación.
- La dificultad de entrar en el “circuito” cultural: Algunas personas, compañías y empresas participan en muchos más eventos y se manejan mucho mejor entre las personas que toman las decisiones a la hora de programar distintos eventos culturales.




Ante esto decidimos:
- Desarrollar actividades culturales alejadas de los barrios de “moda”: Russafa, Cabanyal, Benimaclet, Carmen, Ciutat Vella…
- Fomentar eventos culturales comunitarios.
- Crear espacios de libre expresión y escucha.
- Promocionar a las personas que quieren crear y mostrar su trabajo y no saben donde encontrar su oportunidad.

Entendemos que...

...cuando el hecho cultural se separa de la sociedad y es totalmente dirigido desde arriba, pasamos a un momento en el que el status quo en vez de como un constructo social se entiende como algo natural e inevitable esto y además ser tratado cada día como un consumidor genera una sociedad cada vez más manipulable y pasiva acostumbrada a no participar.
Esta centralización en la que no pueden tomar decisiones y la “cultura” como producto de consumo refuerza una sociedad desigual, individualista y que no participa porque no está acostumbrada a incidir en lo que la rodea.
Por lo tanto uno de los primeros pasos para lograr cambios hacia una mayor participación, justicia e igualdad requieren devolver la cultura a las personas. Haciéndose patente la necesidad de descentralizar la cultura y de hacer disminuir las desigualdades y por otro lado es esencial reforzar todo lo comunitario.



Espacio"público" espacio de poder.

Solo mediante la no concentración de poder y la organización desde abajo existe la posibilidad de lograr una sociedad más justa y humana.

Planes para 2019/2020.

Desarrollaremos cinco eventos culturales basados en el microabierto en distintas zonas de València alejadas de las más saturadas culturalmente dentro de espacios con una relación importante con el tejido social que la rodea.
Una vez seleccionado el espacio nos reunimos varias veces en él para preparar mediante asamblea abierta a la participación de toda persona que quiera el evento que se realizara allí.
La actividad la desarrollaremos especialmente para las personas que viven en la zona pero siempre estamos abiertos a el resto de vecinos de València y de más allá.


En resumen.

Existen dos formas de hacer cultura. De arriba hacia abajo o de manera horizontal.
Siempre es importante pero en estos momentos donde prácticamente nada escapa al poder económico y/o estatal hemos de poner énfasis en recuperar la creación colectiva o comunitaria, pues de otra manera aquellos que tienen poder controlan y controlaran siempre el imaginario colectivo.
Por eso creemos que hay que trabajar para que las personas se conviertan en sujetos activos, creadores y transformadores de su propio proceso vital y cívico.
Que las voces vuelvan a ser de barrio.